El verano apenas comienza y para quienes hacemos fotografía, profesionalmente o no, es sin duda la mejor temporada del año. El collage de colores y formas se conjugan para ofrecernos cualquier cantidad de escenas e inspiraciones.
Y por trabajo, no podríamos quejarnos.
Casualmente hoy, que tengo tiempo de postear en el blog, el día trajo 2 sorpresas nada agradables, especialmente para quienes vivimos y sobrevivimos a los 70´s y 80´s. Primero, la muerte de Farrah Fawcett. Ese ángel texano que se convirtió en un ícono, en un prototipo de belleza y en la fantasía de toda mi generación escolar, aunque tal vez deba decir que de cualquier generación escolar de los 70´s. En mi mente siempre guardaré el collage de imágenes de su enorme sonrisa y de su increíble cabellera dorada.
Poco más tarde durante el día, muere Michael Jackson. La primera vez que lo escuché estaba yo en los albores de mi pubertad y un familiar que vino de visita de Estados Unidos traía música de un grupo que era una sensación en esas tierras: The Jackson 5. Aún recuerdo el cartucho de 8-Tracks con el que escuchamos aquélla canción: ABC....
Tiempo después, crecí, viví y bailé mi adolescencia y juventud a ritmo de Thriller, Billie Jean, Beat it y 50 otras de sus canciones. En mi mente siempre guardaré el collage de imágenes de su manera de bailar y de cantar, de la manera como bailábamos y nos divertíamos con su música en las discotecas de esos años. Y sí, varias veces intenté el moonwalk y no menos veces intenté bailar la coreografía de Thriller.
Pero el mundo sigue su curso y mientras recordamos a quienes se han ido, quienes seguimos aquí y ahora, nos espera un verano mucho muy cálido y Dios sabe cuántas sorpresas más. Entre las cosas en las que he empezado a trabajar, está el proyecto de otra página web donde pueda mostrar mi trabajo profesional, del que ya les he comentado previamente. Espero terminarlo antes de que termine el verano, si la carga de trabajo me lo permite.
Por lo pronto y a falta de un mejor lugar para exponerlo, les dejo un pequeño collage, una sola imágen, pero muy representativa del trabajo que he estado haciendo éstas últimas semanas y que me mantiene absorto y alejado del blog. Entre velos de novia, zapatillas de quinceañeras y retratos de bellezas locales, nuevos y felices collages se guardan en mi mente.
Dentro de 10 años, tal vez escriba un post de lo que hoy es mi día a día y que para ese entonces, serán algunas de mis memorias más preciadas.
