Es uno más de mis visitantes distinguidos.
A diario, recibo la bulliciosa visita de dos o tres gorriones mexicanos (carpodacus mexicanus). Ya escribí anteriormente acerca de uno de ellos, a quien lllamo Rojito.
Éste es uno de los amiguitos de Rojito. Todos los días, alrededor de las 6 p.m., llega el pequeño y escandaloso grupito de gorriones en busca del agua y alimento que les dejo en el patio. El árbol de Mora, que ya dió sus futos de éste año, ya no es fuente de alimento para ellos, es sólo su refugio.
Se han familiarizado tanto conmigo que a veces puedo acercarme a unos 2 metros de ellos. Éste pequeñín me observaba con mucha atención mientras le tomaba la foto.
Si viviera en latitudes tropicales, donde abundan las aves de colores espectaculares, sin duda yo sería un entusiasta ornitólogo aficionado.
2 comentarios:
que afortunado eres mi manuel
yo tengo que correr a los gatos dela vecina de mi balcón
sauludos
David, gracias por la invitación a publizida.es, ya dí de alta el Blog.
Saludos
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