domingo, 5 de julio de 2009

No, yo tampoco voté.....


No, yo tampoco voté.



Hoy es día de elecciones intermedias en México. El hecho de vivir en una calle donde circunstancialmente tengo 2 casillas electorales en un radio de 50 metros de mi casa, me da una idea muy clara de lo que sucedió hoy, al menos en mi barrio.

¿Votantes?: sí, pero muy pocos
¿Como en las intermedias del 2003?: para nada, yo diría una tercera parte o menos
¿Había filas para votar?: ja, ja, ja, ja.... si acaso un votante cada 5 o 10 minutos
¿Votaste?: deben estar bromeando, con esos candidatos, mejor voto por mi abuela difunta, que ella sí era buena y santa..

Y es que la oferta era más mala que la influenza porcina.

A elegir entre los distintos partidos políticos en mi distrito:

Candidato 1: Exalcalde acusado de tráfico de influencias y turbios negocios con proceso judicial vigente. No tengo evidencias de lo que se le acusa, pero mi nivel de duda es más que razonable. No, no voto por él.

Candidato 2: Empresario millonario que dice ser el mejor candidato por no ser político y que no necesita robar porque dinero ya tiene. Malos argumentos, peor plataforma política. No, no voto por él.

Candidato 3: Una total desconocida que por un lado condena el aborto y por otro promueve la pena de muerte. ¿Sabrá lo que quiere decir congruencia?. No, no voto por ella.

Candidatos 4 al 7: Absolutos desconocidos de mini partidos políticos que sólo buscan votos suficientes para no perder el Registro y poder seguir amamantándose de mis impuestos. No, no voto por ellos.

Y no, no me siento mal por no votar. ¿Por qué he de votar si nadie se ha ganado mi voto?.

Por si fuera poco, algunos medios de comunicación fueron restringidos el día de hoy en la TV por Cable: CNN, CNN en Español y TVE de España. Honestamente pienso que violaron mis derechos de información.



Después de 40 años de ver a tantos cerdos en el gobierno (perdón a los nobles cuadrúpedos porcinos por tan vil comparación) he hecho mías aquéllas palabras de Rubén Darío en Los Motivos del Lobo:

y me sentí lobo malo de repente
mas siempre mejor que esa mala gente
déjame en el monte
déjame en el risco
déjame existir en mi libertad


Y en ejercicio de mi libertad no voté ni votaré hasta que alguien merezca mi voto.

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